Una pyme “tech”

11 de julio de 2018

tech

Una tecnología básica es fundamental para que los negocios sean más eficientes y crezcan.

Conquistar nuevos mercados, crecer y ser eficientes en el uso de los recursos y el manejo de la información, son todos logros que las pequeñas y medianas empresas pueden alcanzar más fácilmente si invitan a la tecnología a participar en su negocio.

Y cuando se habla de tecnología es claro que hay diferencias sustanciales según la misión y el propósito de cada empresa, no es lo mismo un negocio para fabricar calzado que uno creado para prestar servicios financieros, pero lo que sí es cierto es que existe una serie de requisitos mínimos que toda empresa debe tener hoy en día.

En primer lugar, la presencia en la web es definitiva. Darse a conocer en la vida actual exige la existencia en internet, la forma en que se haga varía según las necesidades de cada negocio, pues habrá algunos que estén interesados en los negocios on line o en el comercio electrónico, mientras otros solo necesitarán contar qué hacen y dar un número de contacto. Es necesario tener claro que esta presencia en el mundo virtual no exige solo una página web, es fundamental que esta incluya una versión móvil y una versión para tableta porque el crecimiento del uso de dispositivos móviles lleva a un uso más intensivo de las consultas en este tipo de equipos.

En segundo lugar, el mercadeo digital se está convirtiendo cada día más en una herramienta indispensable y para ello son necesarias las redes sociales de la empresa y contratar a un estratega digital que defina qué hacer, maneje las redes para lograr propósitos específicos y produzca contenidos acordes con la marca.

Cabe aclarar que para tener presencia en el mundo digital no se requiere una tecnología muy sofisticada pues basta con tener internet de alta velocidad y acceder a diversas plataformas en la nube para contar con los mejores estándares en materia de gestión y procesos.

Dos elementos indispensables para las empresas que también son posibles gracias a una tecnología básica son la movilidad y la cercanía con el cliente. La resolución pronta de problemas y las respuestas en tiempo real son cada vez más obligatorias en los negocios, para ello son fundamentales los teléfonos inteligentes, contar con WhatsApp y utilizar herramientas como el chat en línea el cual muchas veces puede atender al cliente en forma mucho más ágil que una llamada telefónica o un call center.

En esta búsqueda constante de las soluciones y de comunicar a unos con otros las aplicaciones son herramientas cada vez más usadas. No solo hacen posible negocios conocidos como los servicios de transporte, sino que cada vez se utilizan más como ganchos adicionales para los clientes. Por ejemplo, muchos gimnasios modernos ofrecen una aplicación para sus clientes con la cual pueden medir sus avances en quema de calorías, en logros de tiempos, de distancias, de peso, seguir una dieta, medir su ritmo cardíaco o la calidad del sueño.

En cuanto al comercio electrónico, es muy importante que las empresas evalúen muy bien la necesidad de vender en línea. Cada vez más empresas lo hacen, los clientes lo piden y para ello es necesario contar con la plataforma necesaria, con los sistemas de pago, los programas que permiten organizar despachos, rutas de distribución, sistemas de transporte, de envío y costos de los mismos. Hacer estas operaciones sin tecnología es prácticamente imposible. No todos los negocios están hechos para vender en línea, pero es cierto que esto permite llegar a clientes en otras ciudades, incluso en otros países, y es una tendencia mundial. Basta con recordar que grandes tiendas conocidas de comercio de Estados Unidos cerraron algunos locales o cesaron su operación por el aumento de las ventas en línea, como por ejemplo H&M, Gap o Toys “R” Us, por mencionar algunas.

La realidad aumentada es una herramienta que el comercio y las empresas usan mucho en otros países. En Colombia no es tan popular, pero bien vale la pena que los negocios la conozcan y estudien qué tan útil les puede resultar. Sirve para hacer publicidad, para enganchar clientes, para crear experiencias, para informar. Con lecturas específicas de códigos en el celular, algunos restaurantes del país hacen sus encuestas de satisfacción del cliente, otros ofrecen promociones, unas marcas envían códigos para compras determinadas y para anunciar nuevos productos.

Por la información

Los datos y la información han tomado gran valor en esta época de la cuarta revolución industrial, por eso todas las empresas deben contar con un sistema básico para cuidarlos y protegerlos, y tenerlos a mano, para lo cual nada mejor que estar en la nube.

Con la nube, toda la información del PC pasa a estar en servidores remotos a los cuales las personas que trabajan en la empresa acceden a través de internet ya sea desde un computador, un celular o una tableta. Con la nube también se puede ahorrar la instalación de programas en cada computador del negocio pues el proveedor hace las actualizaciones.

Este sistema también ahorra dinero en la compra del software y de hardware y se puede utilizar en diferentes niveles. Cada pyme debe consultar a un experto para determinar qué necesita, desde la sencillez de almacenar los datos hasta manejar toda la operación de la empresa. Siempre es muy importante consultar los protocolos de seguridad para saber que toda la información del negocio está a salvo.

Las cuentas de los negocios en papel ya son cosa del pasado. Desde las empresas más pequeñas hasta las más grandes pueden manejar su contabilidad en programas diseñados para ello, son seguros y por lo general facilitan que esta se lleve con más rigurosidad y sea más difícil alterarla.

Una buena base de datos con los clientes y toda su información relevante, que se pueda consultar en cualquier momento, de forma ágil, que permita cruzar datos para luego analizar, también es definitiva. Es mucho más que un buen cuadro en Excel, y cuando se tienen muchos clientes, es mejor saber quiénes son, qué hacen y cómo consumen. La buena fidelización requiere estrategias que usan tecnología básica como correos y mensajes, pero para que esto sea efectivo, la base de datos debe estar muy bien construida.

Lo mejor de todo, es que la tecnología no siempre resulta tan costosa y más cuando el mercado ofrece muchas opciones para conseguir los servicios por fuera de la empresa pagando mensualidades o contratos anuales por servicios que van desde la atención 24 horas al día, los siete días a la semana, hasta la tercerización de la entrega de la venta de productos on line y con tarifas especiales para las pyme. No siempre es necesario comprarlo todo, arrendar servicios de tecnología también es una muy buena opción.

Lo máximo

La inteligencia artificial y el internet de las cosas (IoT) están cada vez más al alcance de todos. Por inteligencia artificial se entienden todas las máquinas que “piensan” como los seres humanos y que resuelven problemas.

El reto implica poner dispositivos (hardware) para capturar información que facilite la toma acertada de decisiones, lo que al final hace que cambie la manera de llegar a los clientes o al mercado objetivo.

Estas dos van íntimamente unidas, porque si una empresa tiene objetos conectados que le están brindando datos necesitará analizar estos grandes volúmenes de información pero además la inteligencia artificial le ayudará a identificar patrones, conductas y a establecer qué es lo que las empresas pueden hacer con toda esa información que están recolectando.

Por ejemplo, una pyme puede mejorar la gestión de sus inventarios y dejar atrás la inspección visual con sensores infrarrojos en el techo que no pasan de 5 mil pesos y se conectan a la red y hacen cálculos matemáticos, con lo que la planeación de la logística se hará de forma más rápida y precisa. Las aplicaciones son tan variadas como las necesidades de cada proceso empresarial.

Se puede aplicar geo-referenciación, tomar los datos del censo poblacional y crear estrategias de mercado, las empresas pequeñas también pueden hacer un tema de analíticas y big data.

“En dos años se espera que el 73% de la inversión que se va a hacer en tecnología en el mundo esté concentrada alrededor del internet de las cosas o de la inteligencia artificial”, resalta Benjamín Archila, Gerente General de Consensus.

Algunos ejemplos sencillos son las máquinas que pueden reconocer un rostro, los vehículos que funcionan sin conductor o los mismos algoritmos de las redes sociales que envían publicidad específica según los gustos de los usuarios. Los robots son el ejemplo más común de inteligencia artificial y estos se encuentran en montones de procesos de grandes fábricas y de empresas más pequeñas.

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