Por: Sergio Rengifo, Director ejecutivo de la Asociación Consejo Empresarial Colombiano para el Desarrollo Sostenible – CECODES
Estocolmo+50, reunión internacional acordada mediante resolución de la Asamblea General de Naciones Unidas, se celebró hace algunas semanas bajo el lema: “Un planeta sano para la prosperidad de todos: nuestra responsabilidad, nuestra oportunidad”. La reunión conmemoró el 50° aniversario de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Medio Ambiente Humano celebrada en Estocolmo en 1972, evento que marcó una nueva era de cooperación mundial. En el discurso de apertura, la primera ministra de Suecia, Magdalena Andersson, resaltó que: «la crisis de nuestro medio ambiente y del clima afecta a personas de todo el mundo. Los países desarrollados son los que más contaminan y han contaminado. Pero los más pobres son los más afectados y debemos asegurarnos de que ningún país se quede atrás, que ninguna persona se quede atrás. La transición climática sólo puede hacerse si se realiza de forma social e inclusiva. Esto no es sólo una opción. Es nuestra obligación moral».
En esta oportunidad, la conferencia se centró en la importancia del multilateralismo para hacer frente a la triple crisis planetaria que amenazan la salud humana y medioambiental: el cambio climático, la pérdida de la naturaleza y biodiversidad, y la contaminación y los residuos. La necesidad de que todos nos hagamos parte fue el gran llamado en este espacio, y con esto, acelerar la aplicación de la Agenda 2030 y sus 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).
En línea con este discurso, nuestra casa matriz, el World Business Council for Sustainable Development (WBCSD, por su sigla en inglés), realizó varios paneles enfocados en la cadena de valor, entendiendo que las grandes empresas llevan un camino recorrido que pueden compartir con sus proveedores, distribuidores y grupos de interés. Una de las grandes crisis que generó el COVID19 a nivel mundial fue el riesgo de la continuidad de las cadenas de suministro, especialmente aquellas que recorren todo el mundo para entregar productos y servicios. Se dialogó acerca de cómo generar cadenas de valor más resilientes y que resulten ágiles en la respuesta a situaciones como la de la pandemia. Con ello, se refuerza la importancia de la acción colectiva para transformar empresas que realmente mejoren vidas.
Durante Estocolmo+50, el WBCSD enfocó sus conversaciones en los sectores de construcción, alimentos y agricultura, y en el sector de movilidad. Así mismo, se discutió sobre la adaptación del comercio para la economía circular, e impulsar la rendición de cuentas a través de la transparencia, promoviendo el alcance 3 en la medición de gases de efecto invernadero. Todo lo anterior, podemos resumirlo en la importancia y el llamado para que las pequeñas y medianas empresas comiencen y/o fortalezcan su discurso y accionar en torno a la sostenibilidad. La oportunidad está, las grandes empresas ya llevan una experiencia de aprendizajes y retos de los cuales podemos aprender, y ahora, de cierta manera, todos estamos interconectados a las diferentes cadenas de valor. Por esto, reuniones como Estocolmo+50 nos invitan a pasar de la retórica a las acciones. Ya conocemos que debemos unirnos, que el multilateralismo es la clave, y que la sostenibilidad es un deber, una responsabilidad y una oportunidad para todos. Por esto, desde CECODES promovemos la gestión de conocimiento, entre grandes, pequeñas y medianas empresas, donde todos podemos aprender entre sí a través de nuestra metodología de aprender – compartiendo. Son necesarios estos espacios donde tenemos la posibilidad de escuchar al otro y aprender de los aciertos y desaciertos que han tenido en la implementación de las distintas iniciativas de sostenibilidad.
Esto es un ejemplo sobre cómo podemos escalar en todas las áreas de la sostenibilidad y en el relacionamiento con nuestras cadenas de valor. Desde CECODES desarrollamos el Programa de Negocios Competitivos para Pymes, iniciativa concebida para expandir la cultura de sostenibilidad de nuestras empresas asociadas y otras empresas que quieran fortalecer y minimizar los riesgos sociales y ambientales en toda su cadena de valor. Se trata de una escuela de conocimiento sobre los asuntos clave de Sostenibilidad, que pone en evidencia cómo las empresas, independiente del tamaño, generan impactos sociales, ambientales y económicos, y a partir de esa conciencia les brinda herramientas para que puedan tomar acción. Así es como, entre todos, cumpliremos con los propósitos mundiales de la Visión 2050 y los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). Para terminar, desde CECODES estamos convencidos de que las empresas líderes en sostenibilidad pueden ayudarnos a inspirar a otras, como las pymes, para mostrarles que este concepto es un estrategia diferencial de hacer negocios y brinda una oportunidad de mercado